HSTORIA DRB

Para hablar del nacimiento de Disturbio Rojo hay que remontarse al año de 1994 cuando doce jóvenes capitalinos al ver la gran afición bogotana que existía por el América, la cual se veía reflejada cada vez que el Rojo jugaba en el Nemesio Camacho "El Campin", plantean la idea de conformar una barra que fuera organizada y con un gran numero de integrantes,  para que cantara, saltara, viajara y acompañara al equipo incondicionalmente.

El Disturbio Rojo Bogotá surge como entidad organizada aproximadamente a mediados de 1996, cuando América se coronó campeón por novena vez.  Ese año, el Rojo alcanzó el título de Segundo Mejor Equipo del mundo, solamente superado por el Juventus de Italia.

Para 1997, la barra cuenta con 100 integrantes que empiezan a organizar reuniones con el fin de comprar implementos como el bombo, tiras y demás.  Cada vez  que América venía a Bogotá se veía cómo la hinchada crecía y tenia más fuerza. 

El 10 de mayo de ese mismo año la barra organiza su primer viaje oficial, el destino fue Ibagué, para el cual se desplazaron alrededor de 200 hinchas rojos desde Bogotá y fue así como se empezó a escribir una gran historia por las carreteras y estadios del país. La mancha roja del Disturbio acompañaba al América de Cali a donde jugara.

El año de 1997 fue un gran año para la hinchada capitalina. Se organizaron números viajes entre ellos el clásico ganado 3 a 0 que definió el cupo a la Copa Libertadores. También para la final que América jugó contra Bucaramanga, la barra desplazó alrededor de 500 hinchas a Bucaramanga y Cali, y el premio fue la novena estrella, la primera gran alegría para la barra.

Para el siguiente año la barra era conocida por todo el país por sus numerosos viajes y “aguante” por Colombia.  En Bogotá cada que jugaba el América parecía local, llevando siempre la misma cantidad de hinchas de los equipos de Millonarios y Santa Fe, y algunas veces más.

Posteriormente nació "Disturbio Rojo Bucaramanga" con mas de 300 hinchas oficialmente carnetizados y junto con ellos muchas filiales más, aumentando así el carnaval escarlata por las canchas colombianas.

Para 1999, América gracias a su excelente campaña tendría que disputar dos finales: La Copa Mustang por el rentado Colombiano, y La Copa Merconorte por el torneo Suramericano. Y fue en ese año cuando los Escarlatas le dieron a su hinchada capitalina la Copa Merconorte, ganada en Bogotá contra Santa Fe. 

En el año 2000 se cumple el sueño de todos los hinchas americanos que viven en la capital de la república, pues por motivos de remodelación se cierra el estadio Pascual Guerrero en Cali, y la casa del América para el Torneo de la Copa Toyota Libertadores pasa a ser Bogotá, donde América tenía una de las hinchadas más fieles en toda su historia. 

En este mismo año se da un gran paso para Disturbio Rojo, pues se organiza el primer viaje Internacional de la Barra (el segundo en la historia del barrismo en Colombia) a Ecuador.  En este mismo año América consigue su décima estrella, celebrada por más de 800 hinchas rolos en Cali.

Para el año 2001, la barra es reconocida como hinchada popular del América de Cali y unas de las más fieles del país.  En este año DRB realiza su segundo viaje internacional, el destino fue Venezuela, con dos buses (Aveno Capital y La Fúnebre). Meses después, en el mismo año, la banda vuelve a cruzar la frontera, de nuevo a Ecuador, para apoyar al América en uno de sus encuentros. A final del 2001 América se corona nuevamente campeón, dándole una  alegría más a la barra.

En ese mismo año el Disturbio Rojo sufre un duro golpe pues dos de sus integrantes más destacados, “Chamizo” y  “Quemado”, fueron asesinados en carretera (Cisneros Antioquia). Surgieron en ese moemento muchas ideas, acabar la barra, tomar venganza, pero la decisión tomada por la Cúpula del Disturbio fue seguir al frente y cambiar la forma de pensar de los integrantes de la barra, dejar atrás aquellas épocas de actos vandálicos que nada tenían que ver con fútbol, por seguir de corazón al equipo. 

Después de aquel duro golpe muchos integrantes que no creían en el cambio de la barra o no querían la paz se retiraron, pero la barra con la ayuda moral del equipo quienes presentaron sus condolencias e hicieron varios homenajes por los hinchas caídos, tomó más fuerza para seguir con la historia que Disturbio Rojo Bogotá ha escrito en el barrismo de Colombia.